Bueno compañeros, antes que nada, me gustaría decir (o en este caso escribir) que me da gusto que un proyecto de este tipo se le hubiera ocurrido a nuestro compañero de la carrera, Jonathan Trejo, o Johny, como muchos lo conocemos, y que fue pensando en las necesidades y posibilidades con las que nos encontramos los estudiantes, especialmente en estas épocas en las que todo es más ágil y práctico gracias al internet.
Ya para no hacerles la historia màs larga, este blog fue creado con la intención de dar avisos rápidos para la materia de fisicoquímica II (por el momento, mientras nos ponemos de acuerdo con solo esta materia), especialmente en el laboratorio con el Doctor Emilio, que como ya sabrán, nos pidió que los reportes de las prácticas se hagan con los resultados de todos los equipos. Si alguna vez han visitado un blog, sabrán como funciona el sitema de publicación, comentarios y organización. Sin embargo, hay quienes aun no conocen como funciona un blog, y por eso es que pongo a disposición de ustedes los correos de las personas con las que pueden preguntar todas sus dudas, que por el momento seremos Johny y yo: jonas_muere@hotmail.com y elisendo24@hotmail.com . Si gustan también pueden hacer sus preguntas por medio de los comentarios en esta entrada para un poco más de agilidad en las respuestas.
Otro de los aspectos que trataremos de manejar en el blog, será la forma en que nos pasemos la información de cada equipo, que por ahora sera a través de los comentarios. Pero si lo prefieren, pueden subir algún documento de Word con tales datos a cualquier página de hospedaje de archivos, como
www.zshare.com , que mantiene los archivos indefinidamente siempre y cuando estén activos durante un período de máximo 60 días entre descarga y descarga.
Sin más información por el momento me despido y les dejo un texto que me encontre en el blog de
Javier Smaldone, y esperando que sus comentarios, quejas o lo que sea en este espacio. Hasta pronto!
Si tú tienes una manzana y yo tengo una manzana y las intercambiamos, entonces ambos aún tendremos una manzana. Pero si tú tienes una idea y yo tengo una idea y las intercambiamos, entonces ambos tendremos dos ideas.
Este simple ejemplo de George Bernard Shaw debería ser suficiente para mostrar la diferencia fundamental entre el conocimiento y los bienes materiales. Sin embargo, parece ser la tendencia actual el cubrir al conocimiento con un manto de escasez artificial, impidiendo su difusión para de esta forma asemejarlo a las cosas materiales y tratarlo como a estas últimas.
Este artificio para lograr que las ideas se comporten como las manzanas consiste de marcos regulatorios legales. La idea no es nueva, como lo explica muy claramente Enrique Chaparro, sino que se remonta a finales del siglo XVIII en donde nacen el derecho de autor y las patentes. Lo novedoso es la generalización de la idea de privatizar el conocimiento.
Así como en los comienzos de la llamada "era industrial" fue necesaria la privatización de los medios de producción, ahora se intenta la apropiación del conocimiento humano. Pero, como lo deja en claro el simple ejemplo de Bernard Shaw, este es por naturaleza inagotable y se requiere de mecanismos artificiales para eliminar su capacidad de reproducción infinita.
Así es que, por ejemplo, se patentan algoritmos (ideas puras sobre cómo resolver distintos problemas), métodos matemáticos, secuencias genéticas y proteínas, entre muchos otros ejemplos. Lo que no se tiene en cuenta es que estos "descubrimientos" son sólo el estado actual alcanzado por un proceso evolutivo cultural de varios siglos y, al otorgar la exclusividad de su utilización, se está poniendo una barrera a su continuación.
Triste (y vergonzoso) es ver, por dar otro ejemplo, a universidades públicas firmando acuerdos de confidencialidad con empresas, en el marco de investigaciones relacionadas con la mejora de la producción de alimentos. (¿Cuántos conocimientos previos se utilizarán es esa investigación, amén de los fondos públicos utilizados? ¿No es penoso ver a una Universidad pública ocultando avances científicos que pudieran beneficiar a la comunidad o impulsar nuevos avances?)
Lamentablemente, estamos asistiendo a un nuevo escenario en el mundo del conocimiento y la cultura. Si hemos llegado al grado de avance actual, ha sido gracias a la libre difusión de las ideas (y tenemos grandes muestras en la historia de lo ocurrido cada vez que se intentó ponerle frenos). Parece que muchos están dispuestos a terminar con este proceso evolutivo, a cambio de la explotación del valor económico de la cultura obtenida hasta hoy.
Ortega y Gasset estaría agradecido de que aún hoy la Filosofía no sirva para nada. Tal vez esto evita que la pongan en un frasco o en una caja, la etiqueten y la vendan como un "producto".
Quizás la comunidad científica sea la única que pueda detener el avance de esta tendencia (seguramente ni los gobiernos ni las empresas lo harán). ¿Se prestarán nuestros científicos al comercio del conocimiento? Por ahora muchos meten la cabeza en la tierra...